El Seguro Todo Riesgo Construcción

El objeto de este seguro es cubrir todos los daños y/o perdidas materiales de la obra cuando sea consecuencia de un accidente.

Los trabajos de obra civil e instalaciones (coste de material y de mano de obra), debidos a: Incendio, Explosión, Caída del rayo, Robo y Expoliación, Riesgos de fuerza mayor o de la naturaleza, cuya ocurrencia e intensidad no sea previsible en el lugar de la obra y la época del año, Riesgos inherentes a la ejecución de la obra (excluyéndose siempre las partes viciadas de la obra errores de diseño, defectos en los materiales, mano de obra defectuosa).

La finalidad del seguro de Todo Riesgo Construcción es indemnizar los daños que se produzcan en la obra durante su ejecución, siempre que estos daños o pérdidas hayan sido producidos de forma accidental o imprevisible, cualquiera que fuese su procedencia, incluso aquellas que tengan su origen en los fenómenos de la naturaleza, salvo exclusiones. Esto supone un amplio abanico de posibles riesgos que es preciso delimitar y cubrir.

Es el constructor principal el que normalmente suscribe este seguro, aunque puede hacerlo cualquier persona física o jurídica que intervenga en la ejecución de la obra (propietario, promotor, etc.). Su vigencia viene determinada por la duración de la construcción, iniciándose con los primeros preparativos de la obra y finalizando con la entrega de la misma.

Se cubren de forma esencial los daños materiales a la propia obra, aunque se incluyen los materiales acopiados pero no colocados aún, cubriéndose también un mantenimiento durante al menos 12 meses desde la fecha de entrega de la obra.

De manera ampliada se pueden cubrir, la maquinaria de la obra, el equipo de construcción, bienes preexistentes y gastos de remoción y demolición de escombros. También se pude cubrir la responsabilidad civil extracontractual y las horas extraordinarias para poder recuperar el tiempo de construcción perdido a consecuencia de un siniestro.